A lo largo de su vida, la mujer puede vivir situaciones que provocan cambios grandes en su cuerpo. Los ejemplos más claros de ello son los embarazos y las grandes oscilaciones de peso. Ambas pueden llegar a deformar notablemente el abdomen y la mama, pero también otras partes del cuerpo, como la cara interna de los brazos.
Durante los más de 25 años que llevamos trabajando en nuestra consulta de cirugía estética en Sevilla, numerosas pacientes han acudido a nosotros buscando una solución a un problema que les preocupa, por no encontrar ropa que lo ocultara, especialmente durante la época de primavera y verano: la existencia de un exceso de volumen y/o de flaccidez en la cara interna de sus brazos.
Hoy, en nuestro blog, nos gustaría compartir contigo información sobre la Braquioplastia y la Dermolipectomía de Brazos en Sevilla y de qué manera desde la Clínica Dr. Ortega podemos ayudarte a superar ese complejo de brazos flácidos y/o voluminosos.
¿Cuál es el objetivo de la Braquioplastia?
La Braquioplastia es la intervención quirúrgica dirigida a remodelar la cara interna de los brazos, ya sea a través únicamente de una reducción de su volumen, cuando no existe exceso de piel, o, en los casos en los que sí existe, una extirpación de la piel y de la grasa de esa zona.
¿Cómo es la intervención de Braquioplastia en Sevilla?
En función del origen de la deformidad, existen dos tipos de técnicas:
- Cuando la piel presenta la suficiente elasticidad como para adaptarse al nuevo volumen una vez reducido éste, cosa que suele ocurrir en pacientes más jóvenes, se puede conseguir un buen resultado realizando una LIPOSUCCIÓN de la cara interna del brazo, a través de una o dos pequeñas incisiones en la piel.
- Cuando existe una flaccidez de los tejidos de esa zona, hay que hacer una extirpación de la piel y de la grasa. Es lo que se llama DERMOLIPECTOMÍA.
Si el exceso de piel es moderado, puede conseguirse un buen resultado haciendo una liposucción en el brazo y una extirpación de una elipse de piel únicamente en la axila, lo que deja una cicatriz dentro de la misma.
Cuando existe una flaccidez mayor de la piel, resulta imprescindible realizar una extirpación de piel y de grasa de toda la cara interna del brazo, desde la axila hasta el codo. Esta intervención deja una cicatriz lineal en toda esa zona.
La liposucción de brazos suele durar unos 60-75 minutos y se realiza con anestesia local y sedación intravenosa. Cuando existe una flaccidez mayor de piel hay que hacer una dermolipectomía, intervención que dura unas dos horas y media, y suele realizarse con anestesia general. En ambos casos, la paciente es dada de alta el mismo día de su intervención, teniendo en cuenta que ésta siempre tiene lugar por la mañana.
Respecto al postoperatorio, la paciente debe llevar una prenda compresiva en el brazo durante un mes. Durante las dos primeras semanas debe guardar reposo relativo y hasta pasado un mes de la intervención no debe realizar esfuerzos físicos intensos. Las pacientes no suelen quejarse de molestias después de esta intervención, y suelen referirse a ellas como de las típicas agujetas que aparecen después de realizar esfuerzos intensos. En cualquier caso, estas molestias se controlarán fácilmente con los analgésicos habituales.
Tras dos o tres semanas, la paciente podrá reincorporarse al trabajo, o antes incluso si éste no exige un gran esfuerzo físico.
Resultados de esta intervención
La Braquioplastia en Sevilla tiene unos resultados excelentes en pacientes bien seleccionadas, consiguiendo en ellas unos brazos más delgados y con la piel más tensa y firme.
¿Quieres saber más sobre esta intervención? Puedes encontrar toda la información aquí en nuestra web. Y si quieres conocer más detalles sobre la misma, llámanos al teléfono 954 909 529.
